La comprensión lumbar es un problema que aqueja a muchas personas y suele presentarse al alcanzar la tercera edad. Este suele deteriorar la calidad de vida de la persona, generándole dolores intensos y dificultades al caminar. De esta forma, es indispensable conocer de qué trata este problema de salud y cómo poder tratarla.
¿Qué es y tipos de descomposición lumbar?
Normalmente, la descomposición lumbar se suele tratar a través de un fisioterapeuta, de forma no invasiva e indolora, lo cual permite trabaja directamente con los nervios comprimidos de la columna, específicamente el área lumbar. Su función es aliviar el dolor o pinzamientos de esta zona a través de un tratamiento a los discos para recuperar su tamaño.
Hay casos donde la comprensión lumbar no se puede corregir a través de tratamientos no invasivos, por lo cual los pacientes deben acudir al quirófano. Las cirugías de descomprensión lumbar son bastante rápidas y es un proceso no artificial, donde el paciente no corre ningún tipo de riesgo al realizársela.
Esta cirugía tiene por objetivo calmar el dolor o entumecimiento causado en las piernas a causa de la presión de los nervios. De esta manera, se encarga de eliminar una mínima porción de hueso que se encuentra sobre la raíz del nervio para darle más espacio al nervio y así se pueda acelerar el proceso de sanación.
Esta cirugía es recomendada de hacer solo si se ha intentado con todo tipo de tratamientos no quirúrgicos, sin tener resultado alguno.
La cirugía de descompresión lumbar suele tener dos distintos tipos de procedimientos quirúrgicos, los cuales son:
Microdiscectomía
También recibe el nombre de microdescompresión, la microsidscectomía lumbar (siglas en inglés: LMD) se caracteriza por ser una cirugía que ataca la hernia discal lumbar causante de dolores y entumecimientos en las áreas de las piernas.
El objetivo de esta cirugía es eliminar todo tipo de material sobrante o anormal que se ubique en el disque y que ejerza presión sobre los nervios. De esta forma, con este procedimiento invasivo se logra eliminar el dolor generado por la presión discal lumbar.
Esta cirugía consiste en extraer una pequeña parte del hueso ubicado encima de la raíz nerviosa y del material del disco ubicado debajo de la misma para que así se pueda eliminar el conocido pinzamiento neuronal, causante del malestar en los pacientes. De esta forma, se da mayor espacio a la raíz nerviosa para que sane, generando un alivio en la persona que se sometió a la cirugía.
Este procedimiento se basa en 4 pasos:
- Se separan los músculos de la espalda del arco ósea de la columna.
- Retirando una membrana ubicada en las raíces, se logra ingresar a la columna, usando lupa y microscopio quirúrgico para visualizar la raíz nerviosa.
Es normal extirpar una parte de la articulación facetaría para que la raíz nerviosa no presente ningún tipo de presión.
- La raíz del nervio se mueve ligeramente hacia un lado y se retira el material del disco de la parte baja del nervio.
Laminectomía lumbar
También conocida como descomprensión abierta, se realiza para aliviar el dolor generado por la estenosis espinal lumbar en el paciente. De esta forma, con la cirugía, se logra dar más espacio a la raíz nerviosa, eliminando todo dolor causado por la presión sobre los nervios y permitiendo corregir todo problema relacionado con la espalda. E
Este tratamiento se suele realizar en pacientes ancianos, ya que es común, en esta edad, la aparición de cambios degenerativos que produzca un incremento en el tamaño de las articulaciones facetarías.
Igual que la microdiscectomía y al ser una alternativa del mismo, la Laminectomía lumbar se encarga de eliminar parte del hueso que cubre la parte superior de la raíz nerviosa, y, a su vez, de retirar el disco lumbar ubicado en la parte inferior de la misma. De esta forma, se da espacio al nervio para que se evite la presión generada sobre el mismo.
Este procedimiento consiste en tres pasos sencillos:
- Se hace una pequeña incisión en la espalda y se diseccionan los músculos derechos e izquierdos de la misma.
- Al llegar a la columna, se remueve la lámina que recubre a la raíz nerviosa para poder observarla.
- Normalmente, se recortan las articulaciones facetarías para dar más espacio a la raíz nerviosa.
Síntomas de compresión lumbar
Este problema normalmente genera dolores en el área de las piernas o en la columna. De todas formas, hay que tomar en cuenta si presenta alguno de los siguientes síntomas, los cuales pueden ser causados por una comprensión lumbar:
- Dolor constante en el área lumbar.
- Dolor frecuente en las piernas, como el área de los glúteos, genitales, talones o pantorrillas.
- Dificultad para andar.
- Adormecimiento o sensación de hormigueo en el área de los glúteos o piernas.
- Disminución del dolor al momento de inclinar la espalda o sentarse.
- Debilidad en el área de las piernas.
Si presenta alguno de estos síntomas, lo mejor es acudir a un profesional para hacer un diagnóstico y concluir la causa de estos dolores o incomodidades que presente.
Postoperatorio de la comprensión lumbar
Esta cirugía no trae complicaciones, por lo cual es común que el paciente pueda ser dado de alta en el hospital uno o dos días después de la operación, siguiendo cierto tratamiento indicado por el médico.
Desde que finaliza la operación, el paciente va a tener una faja lumbar que le ayude en el proceso de recuperación de la cirugía. Además, se debe cumplir un reposo de por lo menos 40 días para completar todo el proceso de rehabilitación.
Otras indicaciones que se dan es el de acudir cada 12 o 15 días al doctor para poder llevar el control de las heridas.
Luego de todo este proceso, se comienza el control radiológico por especialistas para iniciar el proceso de rehabilitación funcional.
Como se observa, el proceso postoperatorio no tiene un extenso periodo de tiempo y el paciente simplemente deberá seguir ciertas indicaciones sencillas. Hay casos en los que se presentan cierto tipo de complicaciones, las cuales deben ser tratadas por el profesional del área.
Recuperación y rehabilitación
La cirugía de descompresión lumbar suele ser un éxito en los pacientes que la realizan, aun así, hay algunos casos en donde ni con esta operación se logra solventar el problema. Se calcula que este tipo de casos suceden entre el 3% y 12% de los pacientes.
Hay distintos programas que se emplean en el proceso de recuperación y rehabilitación del paciente, los cuales deben ser escogidos por su médico en referencia al tipo de problema que presente.
En la mayoría de los casos, se emplean tratamiento de fisioterapia donde los pacientes siguen distintos tratamientos y sesiones para volver a sus actividades normales. Además, se suelen hacer indicaciones para que la persona pueda ir adaptándose a los cambios y retomar su vida normal rápidamente.
Otra medida que se emplea en el tratamiento y rehabilitación del paciente es el uso de la faja lumbar. Esta debe ser usada hasta que el especialista dé indicaciones de suspender su utilización. Por ello, es necesario seguir las indicaciones al pie de la letra para evitar efectos adversos de la cirugía.
Después de presenciarse una mejoría o ya cuando el paciente no sienta dolor, se procede una serie de ejercicios para fortalecer la musculatura paravertebral. De esta manera, se evita producir, en un futuro, otro tipo de dolor o de comprensión lumbar.
A su vez, siempre se le suelen dar ciertas recomendaciones al paciente para que evite aparición de otros problemas en la columna. Por ejemplo, se les recomienda hacer ejercicio, adoptar una postura correcta y llevar una vida saludable.